• Facebook logo Instagram logo
  • Endometriosis: la guía completa para conocer sus síntomas, tratamientos y cómo se diagnostica

    © Exeltis Ser Mujer

    Te contamos todo lo que necesitas saber sobre la endometriosis: ¿qué es?, síntomas, tratamiento y mucho más.

    La endometriosis es un trastorno que afecta en torno al 10% de las mujeres en edad reproductiva. A pesar de la cantidad de mujeres que la sufren en todo el mundo, a la endometriosis se le conoce bajo el sobrenombre de enfermedad silenciosa, como a otras tantas, puesto que su diagnóstico es complicado y sus síntomas se asocian a algo muy común: el dolor menstrual.

    Se produce cuando el tejido endometriósico que recubre el endometrio (similar al tejido endometrial) crece en otras zonas y no se puede expulsar con la menstruación. Aunque la intensidad y los síntomas varían mucho de una mujer a otra, es habitual sufrir episodios de dolor muy intenso durante los días de la regla y las dos semanas anteriores. Además, afecta a la fertilidad femenina, por lo que el embarazo natural se puede complicar para algunas mujeres. 

    Si quieres saber en qué consiste este trastorno, cuáles son sus principales síntomas y qué tratamientos son los más habituales, sigue leyendo.

    Endometriosis: qué es

    La endometriosis es un trastorno benigno crónico que se produce cuando el tejido que recubre el interior del útero – es decir, el endometrio – crece fuera de este y termina en lugares donde normalmente no debería estar, como los ovarios, las trompas de falopio y la parte externa del útero. También puede afectar a los intestinos, la vejiga, el recto y el revestimiento de la zona pélvica

    Mientras que el endometrio que crece como revestimiento del útero se engrosa, descompone y expulsa con la menstruación al final de cada ciclo, cuando crece por fuera se desarrolla de manera imprevisible y no tiene manera de salir del cuerpo, por lo que queda atrapado. Con el tiempo se puede agravar al acumularse en abdomen y pelvis. 

    Suele desarrollarse unos años después del inicio de la menstruación, por lo que se empieza a diagnosticar a partir de los 20-25 años. A día de hoy no se conocen las causas por las que se produce la endometriosis, pero sí se sabe que son más propensas a sufrirla las mujeres con antecedentes familiares con endometriosis. Además, se sospecha que podría haber más incidencia entre las que comenzaron a menstruar a edad muy temprana, las que nunca han tenido hijos y las que tienen reglas que duran más de una semana. 

    mujer con endometriosis
    © Exeltis Ser Mujer

    Se trata de un trastorno que puede llegar a ser muy doloroso y que afecta a muchas mujeres en edad reproductiva, pero también es posible tener endometriosis sin dolor. Por ello, aunque la menstruación dolorosa es el síntoma más evidente, no es un indicativo fiable del grado de afección.

    Además de los dolores intensos antes y durante la menstruación principalmente, la endometriosis puede causar quistes en los ovarios y problemas de fertilidad. Sin embargo, ante la duda, no se considera una enfermedad maligna ni tiene riesgo de provocar cáncer.

    Quistes de chocolate

    ¿Has escuchado hablar de los quistes de chocolate? Cuando se forman los quistes endometriósicos, o endometriomas, la sangre que contienen en su interior les produce una coloración marrón oscura, por lo que coloquialmente muchas pacientes los denominan “quistes de chocolate”. Su tamaño es muy variable, pudiendo alcanzar varios centimetros de diámetro. Si estos quistes se rompen y se vierte al abdomen, se produce una gran inflamación y posibles adherencias que el médico debe retirar.

    Endometriosis intestinal

    Cuando el tejido endometrial llega al intestino recibe el nombre de endometriosis intestinal. Si se pega en la parte externa se dice que es superficial, mientras que si llega a la parte interna será endometriosis profunda. Esta puede afectar a ambos intestinos, aunque es más habitual en el grueso. 

    Endometriosis: síntomas más habituales

    El principal y más evidente síntoma de la endometriosis es el dolor intenso en torno a la menstruación, que se manifiesta de diferentes maneras:

    • Periodos muy dolorosos (dismenorrea). El dolor puede comenzar hasta dos semanas antes de la menstruación y alargarse hasta entonces. A cada mujer le afecta de una manera, por lo que los dolores pueden ser leves o tan intensos que interfieren en la vida cotidiana. 
    • Dolor al tener relaciones sexuales o después, especialmente si hay penetración vaginal (dispareunia). 
    • Dolor al orinar, especialmente en los días de la regla. 
    • Dolor en la zona pélvica.
    • Dolor al defecar.
    • Cambios en el patrón intestinal: diarrea, distención del abdomen, náuseas.

    Además, es habitual que la menstruación sea muy abundante y que haya sangrado intermenstrual, es decir, entre reglas.

    dolor de regla endometriosis
    © iStockphoto

    ¿Cómo afecta la endometriosis a la infertilidad?

    Otros de los síntomas – y de las consecuencias – de la endometriosis es cómo afecta al proceso reproductivo. Muchas de las mujeres que sufren endometriosis tienen problemas de fertilidad. 

    Explicado en modo resumido, para que se produzca el embarazo es necesario que el ovario libere un óvulo, que este viaje por la trompa de Falopio para ser fertilizado y termine en el útero. Sin embargo, la endometriosis puede llegar a impedir la propia ovulación, inflamar la zona imposibilitando la unión entre óvulo y espermatozoide e incluso obstruir las trompas de Falopio. Es por ello por lo que la endometriosis no es sinónimo de infertilidad, pero en muchos casos sí se reducen las posibilidades de quedarse embarazada “sin ayuda”

    Síntomas digestivos de la endometriosis

    Como se mencionaba antes, la endometriosis puede alcanzar también el intestino. Los síntomas se pueden confundir con otros problemas digestivos, aunque en el caso de tener endometriosis intestinal, estos suelen empeorar en los días de la menstruación. Los más frecuentes son:

    • Fatiga. 
    • Dificultad para evacuar. 
    • Diarrea persistente. 
    • Estreñimiento. 
    • Gases. 
    • Hinchazón. 
    • Naúseas

    Síntomas psicológicos de la endometriosis

    La endometriosis también afecta psicológicamente a las mujeres que la sufren. Muchas de ellas ven cómo este trastorno afecta a su vida diaria y les impide seguir con sus rutinas y vida familiar o de pareja. Las mujeres que desean ser madres también añaden el sufrimiento de la posible pérdida de fertilidad asociada. 

    Los síntomas psicológicos más frecuentes son:

    • Depresión severa. 
    • Ansiedad. 
    • Apatía o pérdida de interés en el día a día. 
    • Insomnio.
    • Frustración. 
    • Irritación.
    • Nerviosismo. 
    el dolor pélvico es síntoma de la endometriosis
    © iStockphoto

    Diagnóstico de la endometriosis

    Si crees que puedes tener endometriosis es necesario que acudas a la consulta médica para que un profesional de la salud evalúe tu estado físico. Eso sí, es probable que debas insistir en la consulta o probar en varios especialistas hasta dar con el diagnósitico. Para comprobar si hay o no endometriosis, es común realizar las siguientes pruebas médicas:

    • Historia clínica. Para diagnosticar endometriosis, primero tendrás que describir los síntomas que tienes, cuándo los tienes y cuál es su intensidad. En este sentido es muy útil llevar un diario para poder ubicar esos síntomas en el periodo menstrual. También conviene saber si tienes antecedentes familiares de endometriosis (tu madre, tu hermana, tu tía…). 
    • Exploración ginecológica. Mediante el tacto es posible determinar si los ovarios han aumentado su tamaño o si hay presencia de nódulos en la vagina o entre el recto y la vagina. 
    • Ecografía. Es una de las pruebas más importantes, ya que permite ver mejor los órganos reproductores y los posibles quistes producidos por la endometriosis. También se puede determinar la forma y medida del útero y examinar la vejiga. Con la ecografía, además, se ven otros signos indirectos  que son típicos de la endometriosis y que pueden llevar hasta la sospecha y el diagnóstico.
    • Resonancia magnética. Es una prueba no invasiva que ofrece imágenes de órganos y tejidos para obtener información detallada tanto del aparato reproductor como del digestivo, donde muchas veces se adhieren los implantes endometriales. 
    • Laparoscopia. En algunos casos, la endometriosis puede examinarse a través de esta técnica con la que, a través de una cámara se puede ver si efectivamente hay tejido endometrial fuera del útero y, si fuera necesario, obtener una pequeña muestra (biopsia) para analizar. La laparoscopia aporta información muy valiosa acerca de la ubicación y el tamaño de los implantes endometriales. 

    A pesar de ser conocida como una de las enfermedades silenciosas, existen especialistas en este campo y Asociaciones como ADAEC que ponen herramientas en tu mano para guiarte a lo largo del proceso de diagnóstico de la endometriosis. Ejemplo de ello son la Guía de atención a las mujeres con endometriosis en el Sistema Nacional de Salud o la Guía de atención a mujeres con endometriosis en el Sistema Sanitario Público de Andalucía.

    Endometriosis y embarazo

    La endometriosis está muy relacionada con la infertilidad femenina y esto puede añadir una preocupación extra para las personas que deseen ser madres. Aproximadamente un 30% de las mujeres diagnosticadas tienen problemas para concebir. Pero hay esperanza. 

    Aunque para algunas mujeres puede ser difícil quedarse embarazada de manera natural, existen otras técnicas para lograr la fecundación. Las explicamos a continuación: 

    • Inseminación artificial. Se aconseja para mujeres con endometriosis leve que quieran quedarse embarazadas. En estos casos, la permeabilidad de las trompas de Falopio es lo suficientemente buena como para conseguir el embarazo. 
    • Fecundación in vitro. Para casos más avanzados en los que las trompas estén muy afectadas, se utiliza la fecundación in vitro, que permite transferir el embrión directamente al útero. 
    • Ovodonación. Cuando la endometriosis es muy severa los ovocitos son de peor calidad, es necesario recurrir a la donación. 

    Antes de iniciar cualquiera de estos tratamientos, es posible que la doctora o doctor recomiende una laparoscopia previa, ya que esto puede aumentar las posibilidades de embarazo. 

    Vitrificación de ovocitos

    Una manera de intentar asegurar el embarazo en las mujeres que sufren endometriosis y que conocen el riesgo que eso tiene para su fertilidad es congelar óvulos para poder optar al embarazo más adelante. Esta opción se valora tras un examen previo en consulta. Se recomienda para mujeres con menos de 35 años e idealmente con endometriosis no muy severa. El motivo es que, si la endometriosis está muy avanzada, es posible que no se pueda acceder a los ovarios a través de la punción ovárica. 

    Es natural tener infinidad de dudas sobre las posibilidades y opciones que hay de embarazo con endometriosis. Para resolverlas, lo más recomendable es acudir a consulta con un especialista. Son ellos quienes, tras revisar tu historial médico, podrán darte una valoración personalizada.

    Tratamiento de la endometriosis

    En la mayoría de los casos, para tratar la endometriosis es necesario seguir un tratamiento médico o someterse a una cirugía. Deberá ser un doctor quien evalúe y clasifique la endometriosis en un nivel y prescriba el tratamiento más adecuado en función de su gravedad y alcance.
    Independientemente, a continuación encontrarás todas las opciones de tratamiento de la endometriosis para que te resulten familiares:

    Analgésicos y antiinflamatorios

    Para paliar los síntomas de dolor, es habitual que se recete a las pacientes con endometriosis un tratamiento que combine medicamentos analgésicos y antiinflamatorios. 

    Terapias hormonales de la endometriosis

    Es común utilizar tratamientos con hormonas para inhibir la ovulación y aliviar el dolor de la endometriosis durante el ciclo menstrual. Si de forma natural el estrógeno y el gestágeno varían sus niveles para engrosar, descomponer y desechar el tejido del útero, entre otras funciones, con una dosis de hormonas, se consigue inhibir el proceso y acabar con el crecimiento descontrolado del endometrio.

    • Anticonceptivos hormonales:
      • Anticonceptivos combinados: la píldora y el anillo vaginal son anticonceptivos hormonales combinados que contienen versiones sintéticas de las hormonas que participan en el ciclo menstrual: progestágeno y estrógenos. Su uso para tratar la endometriosis está muy extendido ya que contribuyen a reducir o eliminar el dolor en algunas mujeres. 
    • Tratamientos hormonales específicos para endometriosis. Se trata de medicamentos creados específicamente para el tratamiento de la endometriosis y sus síntomas. Son hormonales y solo tienen gestágeno, como la minipíldora o píldora sin estrógenos. Si no sabías de su existencia, puedes preguntar a tu ginecóloga o ginecólogo por esta alternativa a las píldoras anticonceptivas.
    • Agonistas y análogos de la hormona liberadora de gonadotropina (GnRH). Estos tratamientos funcionan impidiendo la producción de hormonas y la menstruación.
    • Inhibidores de aromatasa. Reducen los niveles de estrógeno en el cuerpo, provocando un estado similar al de la menopausia. Pueden aliviar el dolor a las mujeres que no responden a otros tratamientos hormonales. 

    Endometriosis: operación y postoperatorio

    La cirugía de la endometriosis es compleja y recurrir a ella depende siempre del grado de afección de la paciente. Suele indicarse para las que, después de haber seguido un tratamiento médico, no notan mejoría y sufren episodios de mucho dolor. 

    • La laparoscopia no solo es un instrumento de diagnóstico, sino que también sirve para eliminar los casos de endometriosis leve o moderada. Con este procedimiento, la cirujana o cirujano hace una pequeña incisión para introducir un instrumento que, además de detectar las señales de endometriosis, puede eliminar implantes visibles y quistes que pudiera estar causando dolor o problemas de fertilidad. No garantiza resultados duraderos, pero es efectiva para aliviar el dolor en la mayoría de las mujeres. En este caso, el postoperatorio es similar al de otras intervenciones que requieren anestesia general e inflar el abdomen, pero por lo general en dos semanas es posible hacer vida normal y no sentir las molestias típicas de estas cirugías (hinchazón, gases, dolor abdominal, estreñimiento).
    • En casos más graves, es posible que lo más recomendable sea extirpar uno o los dos ovarios, una o las dos trompas de Falopio y/o el útero (operación llamada histerectomía). En estos casos se recurre a una operación laparoscópica y solo cuando no se puede realizar esta última se procedería a hacer una laparotomía para hacer una incisión mayor y poder extraer los órganos afectados. El postoperatorio aquí es más largo: puede durar hasta 8 semanas en las que es recomendable llevar una vida tranquila y reanudar poco a poco las actividades cotidianas que no supongan un riesgo para la recuperación. 

    Medicina natural y endometriosis

    Lo más recomendable es acudir a consulta y seguir un tratamiento médico, pero también se puede complementar con algunos remedios naturales que han mostrado cierta eficacia en el tratamiento de la endometriosis. 

    Se atribuye poder antiinflamatorio a algunos extractos naturales, como la cúrcuma, el té verde, el ginseng, el turmérico y el aceite de onagra, que ampliaremos un poco más abajo. También hay métodos de la medicina natural como la acupuntura, quepodría reducir el dolor de regla a través de su efecto sobre el sistema nervioso central.

    tipos de tratamiento de la endometriosis
    © Exeltis Ser Mujer

    Dieta para la endometriosis

    Nos cansamos de escuchar la importancia de tener hábitos de vida saludable, pero cuando eres paciente de endometriosis, se convierte en algo ineludible. Es fundamental hacer deporte regular, evitar hábitos nocivos como el tabaco o el alcohol, etc. Y parte del tratamiento no farmacológico de la endometriosis reside en la alimentación, concretamente en llevar una dieta antiinflamatoria.

    Aunque no hay ningún alimento que cure la endometriosis como tal, la sintomatología asociada a los desequilibrios hormonales y a las dolencias digestivas sí puede aliviarse con una alimentación basada en el consumo de alimentos denominados protectores, como los vegetales, los cereales integrales, los frutos secos y las grasas saludables como el aceite de oliva. 

    ¿Qué alimentos conviene evitar si tienes endometriosis? Las carnes rojas, los embutidos, los derivados lácteos y los azúcares refinados, ya que son alimentos inflamatorios que pueden empeorar la sintomatología.

    ¿Y qué ingredientes son especialmente interesantes en este punto? 

    El aceite de onagra: un aliado para los dolores menstruales

    Se extrae de las semillas de la prímula y tiene un alto contenido en ácido linoleico y linolénico. Estos ácidos son esenciales para el organismo, ya que contribuyen al buen funcionamiento del sistema inmune, impide la formación de sustancias inflamatorias, inhibe la formación de coágulos y regula los efectos de las hormonas femeninas durante el ciclo menstrual. Es por eso que se recomienda para tratar el síndrome premenstrual y la endometriosis, aunque su eficacia no está médicamente probada. 

    dieta antiinflamatoria para la endometriosis
    © Pexels

    ¿La endometriosis desaparece con la menopausia?

    Respecto a la endometriosis en la menopausia, no hay una pauta regular, pero lo normal es que cuando desaparece el estímulo estrogénico, esta también siga sus pasos. No obstante, vamos a abrir tres caminos sobre lo que podría pasar en esta etapa:

    • La endometriosis desaparece. Sería lo habitual, ya que el ciclo menstrual llega a su fin y con él los desajustes en el endometrio. Este fin es el más habitual en mujeres que han sufrido de manera leve los síntomas de la menstruación durante su edad fértil. 
    • La endometriosis persiste durante la menopausia y es necesario seguir el tratamiento anterior. En estos casos es probable que las mujeres continúen teniendo pequeñas pérdidas y que los fibromas avancen en su crecimiento. 
    • La endometriosis se agrava y no reacciona a la medicación, aunque las posibilidades de que esto ocurra son extremadamente bajas.